Del cielo al infierno / Highest 2 Lowest, Spike Lee, Estados Unidos, 2025

El título en inglés remite a una película (Tengoku to Jigoku) de Akira Kurosawa de 1963 de la que Lee toma el nudo central del relato: el accidentado secuestro del hijo de un hombre de negocios; por la fecha de aquel, el contexto es el de la posguerra, el de Lee, el capitalismo digital, y no se trata ahora de un empresario del calzado, sino de un productor de música pop negra que ha conocido el éxito en décadas pasadas y en el presente intenta conjurar los cambios en el negocio de la música. Denzel Washigton es David King, y como su apellido clama es un poco un rey, aunque no olvida sus orígenes en el Bronx. La intensidad del actor (acá inventa un repertorio de gestos realizados con sus manos que nacen en la adversidad) se acopla muy bien a la estética hiperbólica del cineasta neoyorkino, que apuesta siempre a todo o nada corriendo el riesgo que implica dejarse arrastrar por el exceso. Los planos aéreos iniciales sobre Nueva York tendrán un contrapunto posterior con otros menos favorecidos de la ciudad de los rascacielos, incluyendo varias estaciones de subte, de tal forma que el título no solo se ciñe al hecho de tenerlo todo y poder quedarse sin nada, sino también a la relación entre la opulencia y la carencia con la arquitectura. La escena del rescate es antológica (el ritmo del montaje, la elección de planos y sus escalas), con la intervención en la escena primero de un grupo de fanáticos de los Yankees y luego de una celebración de la comunidad puertorriquense con Rosie Pérez haciendo de sí y Eddie Palmieri interpretando un tema con una banda mientras King entrega un bolso con francos suizos. Es una secuencia encantada que remite poética y visualmente al monólogo de La hora 25 y demuestra a Lee como una malabarista de planos y un funámbulo que domina formalmente el espacio. A la clarividencia respecto de la relación entre arquitectura y pertenencia de clase se añade una meditación indirecta sobre la noción de producción; es un problema que incumbe al personaje de Washigton y duplica la propia posición de Lee como artista: los modos de producción inciden en la perspectiva que se erige frente al mundo que se retrata. Las contradicciones de King son las de Lee, porque personaje y director están en la misma encrucijada: ¿en qué momento la cultura del éxito económico modifica la sensibilidad de una cineasta y un músico?

Roger Koza / Copyleft 2025