FESTIVAL DE CINE DE SAN SEBASTIÁN (2025): VEINTE AÑOS DESPUÉS

FESTIVAL DE CINE DE SAN SEBASTIÁN (2025): VEINTE AÑOS DESPUÉS

por - Festivales
21 Oct, 2025 11:19 | Sin comentarios
Veinte años después, el autor retorna al principal festival de cine de España, percibiendo cambios leves y la familiaridad de un placer ya experimentado. Primera entrega sobre la cobertura de la edición reciente.

En los tiempos en que escribía en la revista El Amante concurrí durante ocho años al festival de San Sebastián, una experiencia notablemente enriquecedora. Distintas circunstancias provocaron que esa colaboración se interrumpiera, algo que lamenté profundamente. Por eso, veinte años después, y escribiendo para otro medio, cuando se me presentó la oportunidad de retornar a ese evento tan querido, no dudé en aceptar el desafío. 

El festival de San Sebastián debe ser uno de los más antiguos del mundo (este año se realizó la edición número 73) y no tengo dudas de que es uno de los que cuenta con un mejor nivel de organización. En lo que hace a la prensa extranjera, la inoxidable presencia de Gemma y Lourdes al frente de ese departamento continúa siendo una garantía de ejecutividad y precisión; en el festival todo funciona de manera perfectamente aceitada: todas las películas llegan, los horarios se cumplen estrictamente. Pero el evento no solo se limita a dar películas, ya que hay también numerosas charlas, edición de libros (hay textos notables dedicados a numerosos realizadores) y también una tienda donde se pueden comprar objetos relacionados con el festival. 

Lillian Hellman

A propósito de esos textos, años atrás, una de las secciones más importantes del festival era la de las retrospectivas dedicadas a grandes directores. Yo recuerdo las completísimas de, v.g., Ernst Lubitsch, Frank Borzage o Henry King, que en su momento cubriera para El Amante. Con el tiempo, esas magistrales muestras se fueron achicando, y en los últimos años fueron mucho más cortas, tomando como base a directores con una filmografía menos abundante.

La retrospectiva de este año, sin embargo, no estuvo dedicada a un director, sino a la escritora, dramaturga y guionista Lillian Hellman, una figura singular dentro de Hollywood. 

Nacida en Nueva Orleans en 1905, Hellman, luego de dedicarse a la crítica literaria, comenzó a escribir obras de teatro, que se caracterizaban por su mirada crítica sobre distintos aspectos de la vida sociocultural de su país. Personalidad de ideas de izquierda, un rasgo que se acentuó luego con su vida en pareja con el gran escritor —y uno de los fundadores de la novela noir norteamericana—Dashiell Hammett.

These Three

Aparte de su militancia política, Lillian Hellman fue una auténtica precursora del activismo en favor de promover el rol igualitario de la mujer en la sociedad. Como no podía ser de otra manera, su ideología provocó que fuera citada a declarar ante la nefasta Comisión de Actividades Norteamericanas del senador McCarthy y que se la incluyera en las listas negras de Hollywood. Hellman, por supuesto, se negó a declarar y dar nombres. 

La retrospectiva que se realizó en San Sebastián incluyó dieciséis títulos de films en los que la escritora participara en los guiones y hay que señalar que no todas tienen similar nivel de relevancia. Corresponde destacar que las colaboraciones de Hellman con el director William Wyler (cuatro películas) mostraron una perfecta química entre la guionista y el realizador. De su obra These Three (1936), acerca de dos amigas acusadas de lesbianismo, se realizaron dos versiones, la primera de 1935 fue censurada y la presunta relación entre dos mujeres se convierte en un triángulo con el prometido de una de las féminas. El remake de 1959 respeta el original, en un tono mucho más dramático y cuenta con notables actuaciones de Audrey Hepburn y Shirley MacLaine.

The Westerner 

The Westerner de 1940 es un caso particular, ya que, según se dice, participaron en ella numerosos guionistas, entre ellos Hellman, que no figura en los créditos. El film, que tuvo un muy buen remake de John Huston, narra la ambigua relación que se entabla entre un solitario forastero y un juez de costumbres más que arbitrarias. Gary Cooper ofrece uno de sus mejores papeles y Walter Brennan ratifica que es uno de los grandes actores de Hollywood. 

La otra colaboración de Hellman con Wyler es The Little Foxes (1940), acerca de las complejas relaciones familiares de una familia sureña en decadencia y en la que Bette Davis ofrece uno de sus magistrales trabajos para la pantalla. También son interesantes The Searching Wind (1946), del subvalorado William Dieterle, un film de marcado contenido antinazi. Y el primer guion filmado de Hellman, The Dark Angel (1931), de Sidney Franklin, un atractivo melodrama que cuenta con un previsible y forzado happy end.

En una próxima nota, reseñaré varias películas que, en mayor o menor grado suscitaron mi atención.

Jorge García / Copyleft 2025