SEMANA DEL 03 AL 09/05 EN CINECLUBES

SEMANA DEL 03 AL 09/05 EN CINECLUBES

por - Cineclubes
03 May, 2010 11:03 | comentarios

LA CUMBRE: EN EL CINE LUIS BERTI, BELGRANO 470

5 de mayo, a las 20.30hs:

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Cochochi, de Laura Amelia Guzmán e Israel Cárdenas, México, 2008

87’ / ATP

Cortometraje, a las 19.55hs: La balada del pequeño soldado (45’), de Werner Herzog, Alemania, 1984

Esta ópera prima de Guzmán y Cárdenas se parece un poco a ¿Dónde está la casa de mi amigo? Aquí no hay que devolver un cuaderno sino encontrar un caballo. Se trata de una travesía, casi cósmica y por momentos cómica, de dos niños indios por el valle de Okochochi, quienes tienen que llevar unos medicamentos a unos parientes. En el viaje, el caballo con el que viajan desaparece. Quizás se lo robaron, quizás el nudo estaba mal hecho. En realidad, es un periplo de conocimiento, y para quien mira el film es un viaje de descubrimiento. Así se revela, paulatinamente, una cultura indígena que convive con la tecnología básica de Occidente: medios de transporte y de comunicación. Hay otra música, otros instrumentos, otro idioma. Una advertencia repiquetea: “Quizás al caballo se lo robó un blanco. Los blancos quieren todo para ellos”. Guzmán y Cárdenas evitan el turismo audiovisual y la curiosidad etnográfica. Es más bien el registro delicado de dos niños en un posible rito de pasaje. Singular y universal, Cochochi es una de las grandes sorpresas del nuevo cine mexicano. (Roger Koza)

VILLA GIARDINO: EN EL TEATRO ALEJANDRO GIARDINO

9 de mayo, a las 20.00hs:

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Go Go Tales, de Abel Ferrara, EE.UU., 2007

93’ / +16

Cortometraje: Tío (5’), de Adam Elliot, Australia, 1996

Go Go Tales es una comedia en estado de gracia sobre un club de strippers regenteado por un descontrolado Willem Dafoe, con miles de mujeres hermosas semidesnudas y Asia Argento haciendo un número erótico con un perro. Tiene una gracia insuperable y, además de las mujeres, hay un montón de actores tanos graciosísimos. Es un vals de una fluidez impresionante, de una ligereza pocas veces lograda (incluso por el mismo Ferrara, que también tiene esos bodoques solemnes). Es como una síntesis buena de su cine, madura e inteligente. El tipo muestra a una banda de perdedores en un boliche en decadencia, pero no hay un momento de sordidez y, en cambio, una apuesta a la pureza que en este caso es la del arte y no la de la religión como en otros de sus films. Es una película que pone de buen humor, a menos que uno sea insensible al cine. (Quintín)