
CANNES 2009: TODO VALE CUESTA CARO
Por Roger Alan Koza
Cannes funciona con piloto automático. Pasan las películas, el público hace colas y luego aplaude, y la crítica es casi siempre condescendiente. Un crítico amigo y muy influyente que escribe en Screen International me decía a propósito de un filme que los dos habíamos visto: ”no fui tan duro con la película porque respeto al director”. Leyendo su crítica, cuesta entender el significado del término duro.
Un film que está en Cannes, se supone, es siempre una película que importa, más si está en la competencia oficial. Lo cierto es que hasta ahora no hay ninguna candidata, y mucho menos, una película que se desmarque de la medianía que predomina en los primeros días en la selección oficial.
Un ejemplo de la mediocridad sofisticada es el de Park-Chan wook. Su última película Thirst, una de vampiros con fondo teológico, evidencia que el sadismo cool que lo catapultó a la fama podrá resultar en algunas ocasiones virtuoso pero es indudablemente insustancial. Habría que pensar cómo se llega a programar una película semejante, en donde un cura católico extrema su espíritu de sacrificio ofreciéndose como cobayo de laboratorio con fines mesiánicos. De 500 casos será el único que no morirá ante la inoculación de un virus. ¿Es la fe, una medicina secreta más allá de la razón? Pero la premisa se abandona muy rápido cuando el religioso se empiece a sentir mal y descubra que bebiendo sangre recupera sus fuerzas. Sí, este filme está en competencia, y muchos dirán que se trata del director de la sobrevaluada Old boy, de lo que se predica una supuesta legitimidad estética. Lo cierto es que Cannes es un club selecto. Park puede estar aquí porque es un nuevo miembro. Godard, por ejemplo, ya no está asociado, de lo contrario su última película Socialismo podría haber estado en competencia
Otra película intranscendente de la competencia oficial es Un prophete. Está dirigida por Jacques Audiard (Lee mis labios), supuesta promesa del cine galo. La película gira en torno a la vida de un convicto de ascendencia árabe y cómo en su paso por la cárcel se va convirtiendo en un mafioso ascendente. El film hablita una lectura política indirecta: el respeto por el lugar del moro en la cultura francesa, hasta se llega a citar un verso religioso. La película es prolija, y ocupa el espacio que el año pasado le correspondía a Gomorra, en este caso, una gran película sobre la mafia que no pactaba con ella. Secretamente, Un prophete se estructura como cualquier película de Hollywood. No hay duda que el trabajo de Tahar Rahim como el joven aprendiz de mafioso es formidable; es posible que se lleve un premio. Algunos pasajes son más que interesantes: la predicción de un accidente, que en parte explica el título, es, valga la redundancia, imprevisible. Pero el problema es otro: si este film se estrenara un jueves cualquiera estaríamos ante una película correcta con ciertas secuencias logradas. Ocurre que Un prophete deviene en inconmensurable si se mide con otros filmes del pasado y del presente. En otras palabras, se advierte una y otra vez que en el criterio de programación de Frémaux adolece de rigor, pues la grilla se predica de una caridad estética excesiva. Una pasada de Tsai Ming liang o de Suleiman, no contrarresta la seductora demagogia de la patronal del cine.
Muchos dicen que lo mejor se puede ver en Una cierta mirada, la segunda competencia de importancia. Aquí la favorita hasta el momento es la segunda película del director de Bucarest 12.08, Corneliu Porumboiu. Police, adjective, no será la película favorita de quienes en Córdoba fallaron en contra del uso privado de estupefacientes, pues el film interpela ese posicionamiento. No la he visto, pero no conozco a nadie que no le haya gustado. Esperaré por ella en Hamburgo, porque Albert Wiederspiel ya la ha invitado. Tanto él como otros programadores y directores se preguntan lo mismo: ¿por qué no está en la competencia oficial?
En esta sección también pasó Air doll, de Hirokazu Koreeda (Nadie sabe). Se trata de una adaptación de un manga es la película más fallida de un director que sin dudas es talentoso. Un hombre de unos 40 años vive una soledad extrema y convive con Nozomi, su mujer, es decir, una muñeca inflable. Una gota de agua la transfigurara en humana; más bien parece un ángel que observa la alienación de la sociedad japonesa en todo sus órdenes. La premisa es más que interesante, pero como ocurre en estos casos, el concepto es mejor que el desarrollo cinematográfico del mismo. Air doll parece un film new age en donde se baja línea sin matices. Su humanismo ramplón, que viene acompañado de una omnipresente banda de sonido, se condensa en sentencias del tipo “es el otro quien nos llena”, o cosas por el estilo. El enemigo conductual es, en ese sentido, preciso: la sustitución. Lo que va del reemplazo de una mujer por una muñeca a un conjunto de prácticas que relevan la otredad o la dispersa en un consumo del otro. Air doll pretende funcionar como una crítica al materialismo rampante de la vida moderna japonesa, pero no consigue siquiera comprender las coordenadas políticas y económicas de por qué el aislamiento y el consumo definen un estilo de vida. Si su película precedente, la gran Still walking, ganadora del premio mayor en Mar del Plata 2008, era una apropiación legítima del cine de Ozu, Air Doll se parece bastante a una película del coreano Kim Ki-duk, un director de segunda categoría que en Argentina goza de acólitos acríticos: las metáforas en el cine son peligrosas, problema central del cine de Kim, y en este caso de Koreeda.
FOTOS: 1) Lluvia en Cannes; 2) fotograma de El profeta; 3) fotograma de Muñeca inflable.
*Este texto fue publicado en otra versión por el diario La Voz del Interior durante el mes de mayo 2009.
Como siempre, muy buena la cobertura. De lo mejor que se puede leer en la prensa argentina.
Además sirve para seguir pensando la «sofisticada mediocridad» que nos impone una mirada colonizada por los festivales europeos.
Un abrazo.
Kim Ki Duk es un buen director hasta Primavera, Verano, que me parece buenisima. Despues vio que le fue bien, se emborracho de si mismo, y se fue al carajo con un monton de peliculas con mensaje espitirual a lo «time». Pero sigo creyendo que algunas cosas que hizo son muy buenas.
Despues, coincido con vos en lo del director de Oldboy, que siempre me parecio un farsante, lo mismo que el director de The Host.
Y otra cosa en la que tenes razon es que Cannes es un club de miembros.
Muy buena la serie de crónicas, aún más la sugestiva foto. Saludos.
Hola Roger:
muchos saludos y mis deseos de que sigas bien; trabajando y pensando en lo que te es màs propio.
Nosotros, aquì, nos beneficiamos con tus entregas.
Nico: gracias por tu apreciación. Después de Cannes subo otro artículo tuyo. Abrazo.
Mirtha: Gracias, mi querida poetisa de V. Carlos Paz.
Ricky: gracias por la evaluación que hacés de la cobertura.
Pablo: a mi entender, los dos mejores directores de cine coreano son Hong Song hoo y Im Kwon taek. Bong es bueno. Park es un invento. Y Kim un plagio. El film que te gusta tanto, lo bueno que tiene, lo sacó literlamente de un film llamado Cuando Buda se fue al Este.
Saludos a todos. RK
No he visto la pelicula que mencionas. Tendria que hacerlo. Por ahora le anoto mi defensa a Primavera, Verano, aun cuando algunos le ven ese tufillo New Age que yo no le veo.
Por cierto, acabo de ver Belle Toujours, que impresionante! Que gran pelìcula. Estaba leyendo tu comentario y coincido en aquello del manejo de la luz: la ùltima escena, la conversacion entre los antiguos amantes, es un prodigio.
no tienes ni idea de cine, amigo. las peliculas de ki duk kimy chan wook park(primero aprende a escribir los nombres coreanos) son bellisimas, prodigiosas, estupendas. hirokazu koreeda me conmovio a los 11 años con nadie sabe, y ahora, con 15, lo ha hehco con still walking. y voy a ver air doll y thirst, solo para cercionarmede que no tienes ni idea de lo que es transmitir sentimientos con imagenes.
he visto la trilogia de la venganza, y es la mejor trilogia que he visto nunca. antes de criticar, estudia cine, por decirte algo, y si en cannes hay miembros fijos, como decis, sera por algo.
Azarosamete lei el ultimo comentario del «fan del cine japones y coreano» y, por mas que no me gusta participar en blogs, me decido a responder incitado por la virulencia del comentario anterior y por ser fiel seguidor desde hace años del cine oriental.
Coincido totalmente contigo Roger en tus apreciaciones sobre el cine coreano. Hong Sang Soo es, lejos, el mejor director de cine coreano y de seguro uno de los nombres mas importantes del cine contemporaneo, lastima lo poco que es tenido en cuenta. Creo que solo Tale of cinema estuvo en la seccion oficial de Cannes, puede ser? Y supongo que eso fue gracias a la produccion de Marin Karmitz. Hong es un digno heredero de un maestro como Im Kwon Taek.
Park Chan Wook esta muy sobrevalorado (la mejor trilogia????). Oldboy esta bien y esta bastante mal al mismo tiempo y eso es lo bueno del film. Simpatia por el Sr. venganza es floja y la mejor es Lady Venganza, o al menos la mas madura del director, a pesar de sus vicios un tanto fascistoides en esa pretendida democratizacion del asesinato colectivo.
Kim Ki Duk era hace lejos y en el tiempo un director con cierto interes que prometia (la sombra de Wim Wenders sobrevuela su cabeza ja). Despues de Hierro 3 su obra es insufrible y hasta pone en duda los, pocos, meritos de sus primeras obras (La isla, Birdcage Inn, Bad Guy).
Menciono como directores a tener en cuenta (y mas representativos del cine coreano que Kim Ki Duk y Park Chan Wook) a Lee Chang Dong, Peppermint Candy y Oasis estan bastante bien (mas floja fue Secret sunshine), Kim Ji Woon (A bittersweet life es excelente, y muy buenas Tale of two sister y The good the bad and the weird) y hay momentos de cine interesante en Im Sang Soo, sobretodo en The presidents last bang, un inusual y sutil film politico en Corea.
Sin ver aun la ultima de Bong, a mi toda su obra previa me parece excepcional y otro director con futuro. Aunque vi hace poco el corto de él dentro del film colectivo Tokio! y me hizo dudar de su talento. Espero no le agarre el sindrome Kim Ki duk.
Sobre el cine japones seria imposible resumir nombres y titulos en un blog. Tiene una vastedad cercano a lo inabarcable.
Solo opino que Koreeda no es de lo mas importante de esa filmografia. Still Walking es lejos su mejor pelicula y una pequeña joyita, pero las anteriores de él son muy irregulares. Son buenas After life (aunque el paso del tiempo capaz no le ha caido bien), Nadie sabe (un tanto sobrevalorada) y Maboroshi. Fallidas Hana y Distance.
Espero haber aportado humildemente algo a la discucion.
Ojala Roger pueda estar el miercoles en La Cumbre viendo a Kiyoshi con su Tokio sonata!!!
Abrazo grande y cada vez mejor el blog. La variedad que tiene lo hace cada vez mas agradable de leer.
Ale Cozza
Querido Ale, más fan del cine oriental: lo que escribiste podría haberlo escrito con mis ojos… Gracias por pasar por aquí.
Al otro fan: entiendo vuestra posición, aunque quizás estés un poco enceguecido por el ismo del fan. Saludos. RK
oasis la vio mi padre y dice que es muy buena, pero la trilogia de la venganza es muy, muy buena, o al menos para mi. yo no creo que nadie sabe este sobrevalorada, es una pelicul durisima, y muy bien interpretada por esos niños que, en el momento en que se rodo, eran muy pequeños. se realizo desde el otoño de 2002 hasta el verano de 2003. ki duk kim si es cierto que pienso que sus peliculas ya no son tan buenas como antes, ero a mi el arco y samaritan girl me gustaron mucho. ayer mismo vi el arco de nuevo y me parecio preciosa. eso si, muchos primeros palnos de la chica, que en mi opinion, es una de las actrices mas guapas que he visto en una pelicula. si es cierto que estos dos directores estan sobrevalorados, pero digo yo que sera por algo, ¿no? si fueran malas, no pasarian por festivales.
aunque esto sea un foro cinematografico, pero os recomiendo el mangwa la bicicleta roja, de dong wha kim. es muy bonito.